Luna en Tauro en la Carta Natal

Quien tiene la Luna en Tauro generalmente valora estar en un clima más familiar, tranquilo y agradable. Son aquellas personas normalmente consideradas más “con los pies en la tierra”, que necesitan seguridad y no les gustan muchos cambios todo el tiempo, siendo propensas a echar raíces. Para lograr esta seguridad, tienden a ser persistentes y firmes, donde la búsqueda del enlace material puede ser constante.

Usan sus sentidos por completo y tienden a gustarles como son. De hecho, el mundo de los sentidos tiende a ser bastante relevante, ya que el signo de Tauro tiene mucha afinidad con todo lo que puede ser tocado, sentido, práctico.

La comodidad tiende a ser muy importante, por lo que tener un hogar cómodo y una vida estable los hace sentir más seguros y felices. No es bueno tratar de obligar a quienes tienen la luna en Tauro a hacer algo abruptamente, ya que tienen propensión a ser tercos, pero también muy perseverantes y prácticos al tomar una decisión.

Una cuestión de estabilidad

Las personas con esta posición son propensas a concentrarse en crear y mantener las cosas seguras, por lo que generalmente transmiten esta sensación de protección a quienes los rodean. Y tienen este sentimiento debido a una forma realista y estable de manejar sus emociones, donde en tiempos de crisis son los más tranquilos y confiables. Se esfuerzan por evitar circunstancias y problemas imprevistos, así como para evitar discusiones públicas. No les gustan mucho las sorpresas o las exhibiciones públicas; es decir, el rasgo más conservador de estos nativos puede ser enloquecedor para las personas con personalidades más progresistas y dinámicas. Como Tauro es un signo regido por Venus, una energía más pulida, cosas como esas son capaces de desorientar sus emociones.

Esta es una posición práctica, estable y exaltada de la Luna, que le da al nativo una mayor capacidad para protegerse a sí mismo y a sus intereses. Es raro que hagan algo sin determinar primero si es seguro y/o si aportará algún comentario práctico y útil, que puede no ser necesariamente material.

Sus necesidades son fuertes, pero al mismo tiempo, muy simples: les encantan las cosas buenas de la vida y eso puede ser un respiro para su alma y una ayuda en momentos de gran tensión. También son propensos a ser leales. Algunos tienen un verdadero “toque de Midas” y son buenos para hacer que las cosas crezcan y prosperen.

La tranquilidad que emana del alma.

Las personas con Luna en Tauro por lo general son tranquilas y sus emociones son sólidas y estables. Sentimentales y cariñosos en general y en su círculo íntimo, la mayoría de las veces, tienen instintos muy confiables. Están muy conectados con el mundo físico y normalmente tienen un sentido del olfato y el gusto bien desarrollado, por lo que les gusta comer bien, la buena comida tiene un fuerte atractivo. Es bueno cuidarse de los alimentos calóricos y los dulces en general.

Esta necesidad de lo que es concreto, físico, palpable puede hacer que siempre quieran satisfacer sus deseos. Debido a que reaccionan a las cosas de forma posesiva, pueden terminar siendo celosos. Sin embargo, las relaciones con las personas que nacen en esta posición de la Luna a menudo son bastante duraderas, donde los nativos pueden permanecer con sus compañeros incluso cuando ocurren peleas y desacuerdos sin la necesidad de darse por vencidos. Tauro es un signo fijo, por lo que las separaciones no ocurren fácilmente.

A salvo de otras posiciones o aspectos que interfieren, es necesario provocar a alguien con la Luna en Tauro lo suficiente como para sacarlos de lo serio y sacudir sus emociones. Sin embargo, cuando se ponen serios, en general es de forma brusca. Lo ideal es alejarse para dejar que se calmen solos.

Su amor por la estabilidad, la practicidad y la seguridad pueden hacerlos esclavos de la rutina, por lo que en las relaciones pueden no darse cuenta de cuándo su pareja necesita cambios o estímulos emocionales, incluso si se trata de una simple caminata en un lugar diferente, por ejemplo. El problema es que muchos tienen una terquedad que los hace resistentes a ciertos cambios, su lema podría ser: en un equipo que está ganando no se debe mover nada. Cuando te sientes muy cómodo con las cosas, se vuelve aún más difícil cambiar. Entonces el que termina sufriendo es el compañero si no es muy adepto a la rutina.

No es raro que aquellos que tienen la Luna en Tauro se aferren a cosas del pasado y tengan una tendencia a coleccionar cosas. Esto proviene de la necesidad de poseer y tocar, de tener bienes y aplicarles un valor personal.

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